La semana laboral de cuatro días: entre promesas y realidades en España

• El proyecto ya lleva 3 años de retraso.
• Hay empresas privadas que lo han implementado y les ha funcionado.
• Actualmente se debate una propuesta mucho más modesta: 2,5 horas semanales de reducción.

La semana laboral de cuatro días ha pasado de ser una utopía a convertirse en realidad para algunas empresas españolas. Este nuevo modelo laboral promete revolucionar la forma en que concebimos el equilibrio entre trabajo y vida personal. Pero, ¿qué tan cerca estamos realmente de que se generalice?

A pesar del entusiasmo inicial y las promesas políticas, la implementación se ha topado con retrasos y desafíos. Mientras tanto, algunas empresas han decidido dar el salto por su cuenta y han cosechado resultados sorprendentes. ¿Será la semana de cuatro días el futuro del trabajo en España o quedará como una experiencia aislada?

Retrasos y desafíos en la implementación de la semana laboral de cuatro días

El camino hacia la semana laboral de cuatro días en España ha estado lleno de baches. La convocatoria, a la que se presentaron 41 pymes industriales en 2021 sigue sin resolverse. Esto significa que ninguna empresa ha recibido las ayudas prometidas de hasta 200.000 euros para implementar la jornada reducida. El objetivo era claro: reducir un 10% la jornada laboral durante al menos 24 meses, sin recortar salarios.

Sin embargo, la falta de avances concretos ha dejado a muchas empresas en un limbo, esperando una respuesta que no llega. Además, el recorte en la financiación del programa ha sido drástico. De los 50 millones de euros inicialmente prometidos, solo se destinaron 10 millones en los presupuestos de 2022. Esta reducción del 80% en los fondos disponibles plantea serias dudas sobre el alcance real del programa piloto.

Experiencias exitosas: empresas españolas pioneras

A pesar de los obstáculos a nivel gubernamental, algunas empresas españolas han decidido dar el paso por su cuenta. Los resultados han sido prometedores. Software DELSOL, una compañía con sede en Jaén, se convirtió en pionera al implantar la semana laboral de cuatro días. De esto hace casi cuatro años.

Su modelo es flexible: los empleados trabajan entre 34 y 36 horas semanales, repartidas en cuatro días que ellos eligen. La empresa mantiene sus operaciones de lunes a viernes, lo que permite a los trabajadores adaptar su horario. La medida ha sido “muy positiva y muy bien valorada” según representantes de la empresa.

El éxito de Software DELSOL no ha pasado desapercibido. La empresa entró en el listado para España de la consultora internacional Great Place to Work. Esto atrajo la atención de otras compañías e incluso de grupos políticos interesados en su modelo laboral.

Comparativa internacional: avances en otros países europeos

La semana de cuatro días no es una idea exclusiva de España. En Europa varios países han explorado esta posibilidad con diferentes enfoques. Por ejemplo, Bélgica dio un paso adelante en 2022 al reconocer la semana de cuatro días en su reforma laboral.

Sin embargo, su modelo mantiene las 38 horas semanales, permitiendo a los trabajadores concentrar sus horas en menos días. Reino Unido, Italia y Francia han optado por proyectos piloto similares al español.

Perspectivas futuras y retos para la reducción de la jornada laboral

El futuro de la semana laboral de cuatro días en España sigue siendo incierto. Mientras el programa piloto gubernamental acumula retrasos, la negociación actual entre Gobierno, sindicatos y patronal se centra en una reducción más modesta: 2,5 horas semanales. Esta propuesta, aunque menos ambiciosa, ya genera tensiones entre las partes implicadas.

Los sindicatos abogan por una reducción efectiva que beneficie a los trabajadores sin perjudicar a las empresas. El reto está en encontrar un modelo aplicable a gran escala y que considere las particularidades de cada sector.