Déficit público en España aumenta 10,6%: el impacto de los salarios, pensiones y deuda

• Déficit público en España aumentó un 10,6%, impulsado principalmente por el incremento en los gastos de salarios de funcionarios, pensiones y el pago de intereses de la deuda.
• La deuda pública de España ha alcanzado el 113% del PIB, secundaria a la inflación y la necesidad de cubrir las nóminas y pensiones.
• Aunque la Seguridad Social reporta un superávit de 543 millones de euros, este depende de transferencias del Estado que suman 32.464 millones de euros para cubrir gastos no autofinanciables.

El aumento del déficit público en España, que ha crecido un 10,6% en el último año, está directamente influenciado por diversos factores estructurales. Entre ellos, los más destacados son el incremento de los salarios públicos, el gasto en pensiones, y la creciente carga de la deuda. 

Aparte, según el último informe publicado por el Ministerio de Hacienda, la deuda pública de España se sitúa cerca del 113% del PIB. Por lo tanto, se instaura un escenario complejo, impulsado por el aumento de la inflación y la presión sobre el gasto social, sinónimo de más obligaciones del Estado con los empleados y jubilados públicos. 

Dadas las circunstancias, España se enfrenta a un momento crítico en cuanto a su deuda pública. Incluso, podría alcanzar el 114% del PIB para 2028, según estimaciones recientes de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF). 

¿Por qué aumenta el déficit público en España? – Factores clave

Según los datos actualizados de octubre de 2024, el déficit público en España creció un 10,6% debido principalmente a un incremento en gastos de salarios, pensiones y pagos de intereses. 

Aunque el crecimiento de la economía ha sostenido ingresos fiscales estables, la subida en costos estructurales y el entorno de inflación, siguen complicando la reducción del déficit hacia el objetivo del 3% del PIB previsto para fin de año.

De acuerdo con el Ministerio de Hacienda, la diferencia entre los ingresos vía impuestos y el volumen de gasto público es abismal. Siendo específicos, supera los 35.000 millones de euros, por lo que se convierte en un agujero presupuestario que simboliza hasta el 2.27% del PIB. 

Inclusive, el documento realiza una breve comparativa entre el equivalente al PIB de este año, con el anterior. Para finales de 2023, la diferencia entre ingresos y el volumen de gasto público representaba el 2.17% del Producto Interno Bruto, por lo que pone de manifiesto las carencias del gobierno en pro de reducir y ajustar el déficit.

Seguridad social, deuda pública y sus intereses – Más presión para el déficit público actual en España

Según el informe del Ministerio de Hacienda, el Estado ha incrementado su gasto en un 4,7% respecto al año anterior. La razón radica en cubrir las nóminas de funcionarios, alcanzando un total de 16.035 millones de euros. 

Vale la pena subrayar que tal incremento es secundario a la subida salarial del 2% retroactiva desde enero y al ajuste del 0,5% para 2023, que resultó en un acumulado del 3,5% en 2023.

Asimismo, los intereses de la deuda pública registraron un aumento evidente del 14,4%, sustentado por la constante elevación de los tipos. Aparte, el gasto en pensiones de clases pasivas, como las de empleados públicos, subió un 7,1%, sumando 15.670 millones de euros. 

Paralelamente, la Seguridad Social ha logrado un superávit de 543 millones de euros hasta agosto. No obstante, no quiere decir que sea autosuficiente en sus finanzas.

Dicho saldo depende en gran medida de las transferencias del Estado, que en lo que va de año, sumaron 32.464 millones, un 7,6% más que en 2023, para cubrir gastos impropios y el pago de pensiones extraordinarias. En otras palabras, son aditivos que exceden su capacidad de autofinanciamiento y contribuyen a la deuda pública. 

¿Podrá España cumplir con las exigencias de la Comisión Europea en cuanto a deuda?

A nivel europeo, la Comisión Europea ha comenzado a solicitar a los países miembros, incluida España, que reduzcan su déficit en los próximos años. El objetivo es lograr una disminución sostenida que permita cumplir con los límites establecidos en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la Unión Europea. 

Básicamente, la meta es que el déficit público en España no supere el 3% del PIB. Sin embargo, las previsiones actuales muestran que el país enfrentará retos adicionales en el corto plazo, lo que complicaría el cumplimiento de estas metas.

A pesar de estos retos, el gobierno español ha implementado ciertas medidas para contener el déficit, como la inversión y revisión de algunas ayudas temporales. No obstante, La AIReF sugiere que, sin reformas, España enfrenta la presión de implementar medidas fiscales sostenibles para evitar una trayectoria de deuda insostenible en el largo plazo.

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